Dos organizaciones de mujeres, la Asociación Flor de Piedra, dedicada a la promoción y defensa de los derechos de las Trabajadoras del Sexo y el Instituto de Investigación, Desarrollo y Capacitación de la Mujer, IMU, al servicio de la construcción y el ejercicio de la ciudadanía plena de las mujeres, que trabaja esencialmente con mujeres del ámbito rural, se unen bajo un objetivo común: contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de las mujeres en El Salvador, promoviendo su protagonismo en la sociedad.
Además de contar con los recursos de estas dos asociaciones, el Proyecto está siendo financiado con fondos de la Unión Europea y de Progressio, un organismo británico con sede en Londres, Reino Unido, que lleva más de cuarenta años promoviendo el desarrollo y desafiando la pobreza.
El reto final de este proyecto es realizar dos campañas que contemplen las demandas de todas las mujeres participantes y lograr que al menos una de las políticas públicas que hayan promovido se esté aplicando.
Aunque parecía difícil articular los intereses de grupos de mujeres en un principio tan diferentes, la realidad demostró lo contrario. A través de la organización de lo que se llamó “Encuentros Nacionales”, 260 mujeres de las dos asociaciones pusieron en común sus preocupaciones, sus anhelos y sus sueños.
Descubrieron que se enfrentan a los mismos obstáculos que les impiden desarrollarse como sujetas libres y como ciudadanas en este país y eligieron un tema común para la incidencia política: la violencia económica hacia las mujeres en El Salvador.
Esta forma de violencia, cuyas expresiones pasan generalmente inadvertidas, hace referencia a todo acto de violencia que se produzca en la vida privada o en la pública, basado en la pertenencia al género femenino, que vulnere los derechos económicos de las mujeres causando un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico.
A partir de ese momento, se decide posicionar el tema de la violencia económica en la agenda pública haciendo énfasis en la visibilización del trabajo del cuidado que realizan las mujeres en El Salvador
Un grupo representativo de todas las mujeres participantes del proyecto, reunidas bajo el nombre de “Comisión Nacional de Incidencia”, pasó a desarrollar un plan de incidencia con el objetivo de posicionar el tema de la violencia económica en la Agenda Pública de El Salvador.
Un plan que se apoya en una investigación realizada por dos cooperantes de Progressio, Gloria María Araque y Adriana Ospina: “La Violencia Económica hacia las mujeres en El Salvador: aproximaciones a un problema social invisibilizado”.
Esta investigación complementa, por otro lado, una campaña de comunicación a nivel nacional destinada a sensibilizar a la población salvadoreña, y en especial a las mujeres, sobre los efectos que este tipo de violencia tiene sobre sus vidas.
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